De la deuda prudente al crecimiento sostenible

SEÑOR DIRECTOR:

Recientemente se ha hecho pública la cifra de deuda pública del gobierno central, generando una serie de opiniones de carácter alarmante sobre la sostenibilidad de una deuda prudente y la ejecución del gasto público. En contribución a este debate, quisiera incorporar algunos aspectos que a menudo se han pasado por alto.

La evolución de la deuda pública respecto al PIB no depende solamente del gasto, sino también de los ingresos fiscales y del PIB en sí mismo. De esto se derivan elementos importantes.

En primer lugar, los ingresos fiscales han experimentado una disminución significativa, con una caída real del 29,9% en la recaudación del impuesto a la renta y 8,3% en el IVA. Frente a esto, es inevitable pensar en reformar el actual sistema tributario, el que posee amplios espacios fiscales para gravar la riqueza y consolidar mayores ingresos fiscales estructurales. Un claro objetivo de ello es aumentar la recaudación fiscal de Chile, notablemente inferior al promedio de los países de la OCDE (22,2% contra un 34,1% al 2021).

En segundo lugar, al hablar de sostenibilidad de la deuda, es crucial orientar el debate hacia el crecimiento sostenible del PIB. El estancamiento productivo que sufre la economía chilena, no solo en los últimos dos años sino durante más de una década, es la principal causa de una economía que, dada su estructura productiva, carece de perspectivas de crecimiento sostenido. Tal como se ha hecho en aquellos países que han logrado superar la trampa del ingreso medio: discutamos sobre cómo hacer política industrial que permita cambiar nuestra estructura económica hacía una que promueva un crecimiento sostenible.

Ignacio Silva Neira

Director Ejecutivo del Observatorio de Políticas Económicas

*Carta al director publicada por La Tercera

Felix Ordoñez